Así logramos la Agenda Prioritaria de la Alianza de Mujeres por la #DemocraciaEnIgualdad
Cuando emprendimos la Alianza de Mujeres por la Democracia en Igualdad, en mayo de este año, queríamos estrechar lazos de confianza entre las mujeres venezolanas para lograr la participación de manera paritaria en la toma de decisiones y en los mecanismos nacionales e internacionales para la solución de la crisis venezolana.
Entendíamos y entendemos la necesidad de escuchar todas las voces, así como también de facilitar acuerdos, porque necesitamos lograr una visión compartida de cómo queremos vernos a las mujeres venezolanas en el futuro. Por eso convocamos a mujeres con distintas experiencias de vida: representantes del sector universitario, profesionales de organizaciones de la sociedad civil, defensoras de derechos humanos, periodistas y a mujeres de las bases de los partidos. Empezamos este recorrido ilusionadas.
Primero, nos inspiramos al escuchar las experiencias de mujeres protagonistas en transiciones y cambios democráticos en sus países. Gabriela Vargas, desde México; Elena Ambrosi Turbay y Claudia Mejía Duque, desde Colombia; y Amelia Valcárcel y Delia Blanco Terán, desde España, compartieron sus enseñanzas en el ciclo de foros que preparamos, al que también asistieron representantes venezolanas con las que reflexionamos si es posible lograr una transición pacífica en el país.
Todas sus experiencias y la importancia de sus recorridos nos dejó claro que era necesario tener una agenda común en la que estableciéramos cuáles eran aquellos aspectos que, de manera prioritaria, íbamos a impulsar juntas. Pero para hacer esta agenda nos venía bien el apoyo de quienes tienen experiencia en esto.
Invitamos a dos expertos en el campo de la negociación para que dieran un taller de facilitación que nos ayudara a establecer una visión compartida sobre el rol de las mujeres en el presente y futuro de Venezuela. Edward Kaufman, profesor de la Universidad de Maryland y de Universidad de Haifa, promotor de proyectos de diplomacia ciudadana en América Latina y en el Medio Oriente; Alan Dosoretz, licenciado en Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Argentina de la Empresa, UADE; especialista en Israel y Medio Oriente de la Universidad Hebrea de Jerusalén, en colaboración con nuestra presidenta Natalia Brandler, impartieron seis sesiones a lo largo de los últimos meses.
Las primeras sesiones del taller sirvieron para prepararnos, porque antes de comenzar a hacer cualquier proceso de negociación, hay que saber cuáles son las dificultades que tienen las personas para comunicarse y cómo comunicar ideas de forma respetuosa y asertiva. A partir de allí, quisimos crear el espacio para discutir esos aspectos que nos afectan, inquietan y que ameritan nuestra atención con el fin de lograr su inclusión en esta agenda común.
A lo largo del taller, de manera colaborativa, fuimos sumando aquellas exigencias que consideramos necesarias al momento de negociar. La lista era larguísima y, con mucha razón, las mujeres venezolanas hemos sido relegadas y las políticas que han surgido carecen de perspectiva de género.
La experiencia fue muy satisfactoria. Sobre eso da fe Sandra Flores, una de las participantes, quien valora “el conocimiento, de elevada calidad, sobre resolución de conflictos que nos han brindado”, además del espacio para fortalecer su relación con otras colegas políticas y de la sociedad civil.
Por su parte, otra de las participantes, Mariela Magallanes, nos comenta que las herramientas adquiridas en el taller “permiten formarnos y estar preparadas para la reconstrucción del país. Las mujeres vamos a jugar un rol fundamental en el cambio y la transformación. Ese cambio lo estamos comenzando desde ya".
Mariana Vahlis define el evento como necesario y urgente. “La experiencia de CAUCE en el área de promoción de participación política de las mujeres más el enfoque en diplomacia ciudadana y transformación del conflicto que se dio en los talleres fue una combinación perfecta y necesaria para empezar a abordar un tema que es urgente en Venezuela”, dijo.
“El objetivo de promover una agenda conjunta es necesario para que definitivamente los temas relacionados con las agendas de mujeres y de la igualdad empiecen a tener un espacio en la opinión y en la agenda pública”, concluyó Vahlis.
A través de este proceso la Alianza de Mujeres por la Democracia en Igualdad hizo un documento que recoge todas las propuestas de las participantes del taller y que finalmente agrupa en un solo lugar esas exigencias prioritarias que tenemos las mujeres venezolanas.
Este camino sigue adelante, sobre todo ahora cuando sabemos que existen sectores que han llamado a una negociación. Eso sí, les dejamos claro que tenemos que estar en el proceso, y seguimos diciendo #NoSinMujeres.